En los últimos quince días en el Centro Sudeste de la provincia los machos lograron mantenerse en un momento ajustado desde lo económico y climático.
Muchas localidades de nuestra región se encuentran comprometidas desde el aspecto hídrico. Hay un retraso muy importante de precipitaciones con lo cual la disponibilidad de campos para alojar hacienda es limitada.
Las hembras repitieron bajas, las proyecciones económicas de los encierres a corral no permiten convalidar los valores de semanas atrás. Los números de los feeedloteros vuelven a ser negativos y esto se refleja en las dificultades que presenta la invernada para levantar precio aún en meses de escasez de oferta. 
Sin mejorar el precio de venta de la hacienda, y con costos crecientes de alimentación y estructura, la única variable de ajuste es la invernada. La calidad bajó, el ternero está más desvistado y si a eso le sumamos las variables antes mencionadas, hacen que esta quincena no haya sido de las mejores.
La vaca sigue con su curso normal, China empuja fuerte y cada vez se achica más la brecha entre las gorda, manufa y conserva. El consumo está quieto y las subastas en las ferias están regidas plenamente por lo que marca Mataderos. Sin locuras los operadores hacen los negocios y completan jaulas que le permite seguir girando la rueda.
El vértigo lo dan los reproductores
Con gran oferta de remates de toros y vientres en el centro Sudeste de la provincia de Buenos Aires, la campaña 2019 avanza a un ritmo vertiginoso. Tanto en los establecimientos de las cabañas como en las diferentes instalaciones ferias ejemplares de pedigree, controlados y generales desfilan exponiendo el trabajo anual de cada productor.
Valores sostenidos, algunos más “picantes” otros un poco quietos son los que aportan los oferentes que buscan genética para la mejora de su rodeo. Se invierte, se apuesta y se trabaja a largo plazo sin pensar en medidas aisladas o en gobiernos que llegan o que se van.
Se ven caras de satisfacción cada vez que se baja el martillo final, y eso demuestra que es una campaña que avanza, que tiene la incertidumbre basada en la economía del país, pero que con el esfuerzo de los cabañeros acompañados por las consignatarias hacen que el producto de excelencia que preparan se vendan y permitan seguir avanzando en pos de la ganadería nacional y de calidad.

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